viernes, 15 de abril de 2016

La inteligencia
artificial

¿Hacia dónde nos lleva?


La palabra robot, acuñada en 1921 por el escritor checo Karel Capek, ya ha dejado
de ser sinónimo de androides metálicos que van moviendo sus brazos como tentáculos,
mientras avanzan sobre sus rueditas por el planeta de las Amazonas Sicodélicas. Los robots serán parte de nuestra vida cotidiana.

Somos como tristes Gepetos soñando con darle vida a un muñeco de madera para no sentirnos
tan solos.

Procurando ese sueño, el industrial estadounidense Joe Engelberg construyó un prototipo en los años cincuenta, y en la década siguiente vendió su primer robot útil.

Pero realmente los robots dejaron de ser ficción en los años ochenta, cuando brazos gigantes que se
movían obedeciendo un programa predeterminado, desplazaron a los obreros en las fábricas automotrices de Japón. Pero todo esto aun es muy costoso.

Un día, la producción en masa hará a los robots baratos. Si algunos tendrán una figura semejante a la nuestra, está por verse. Lo que parece más factible es que sus cerebros electrónicos tengan
algún grado de inteligencia.


¿Puede la inteligencia
ser artificial?

La inteligencia artificial (IA) puede definirse como el medio por el cual las computadoras, los robots y otros dispositivos realizan tareas que normalmente requieren de la inteligencia humana.

La IA agrupa un conjunto de técnicas que, mediante circuitos electrónicos y programas
avanzados de computadora, busca imitar procedimientos similares a los procesos inductivos y deductivos del cerebro humano.

Entre sus aplicaciones destaca la poderosa computadora Deep Blue, que puede vencer a cualquier
jugador de ajedrez: no sólo tiene gran cantidad de jugadas programadas, sino que aprende de su adversario, por lo que se va volviendo capaz de adelantarse a las decisiones de su enemigo y hundir sus estrategias antes de que prosperen.

Se espera que en poco tiempo, imitando el funcionamiento de nuestro cerebro, las computadoras ya no tendrán un gran procesador, sino miles (y más adelante millones) de pequeños procesadores totalmente interconectados entre sí, lo que permitirá la maravillosa capacidad de aprender a través de experiencias recogidas por los “sentidos” de la máquina (cámaras de video, micrófonos, etcétera).

Algún día, el Sojourner, el robot que exploró Marte, será una caja de zapatos comparada con los que llegarán a ese planeta, no para posar un espectrómetro sobre las piedras, sino para construir los centros urbanos de los primeros colonizadores. La última frontera serán los robots biológicos autorreplicantes que poblarán en nuestro nombre otros sistemas solares hasta hacerlos habitables para
nuestra especie.


¿Y la gente?


Es casi seguro que la inteligencia artificial y el desarrollo tecnológico subsecuente estarán al servicio
de una minoría. Si por el contrario, el desarrollo tecnológico –y específicamente la inteligencia artificial— se utiliza para lograr que todos en este planeta logremos un mejor nivel de vida en estricta relación con el medio ambiente, tal artificio será realmente inteligente.

Entrevista con el doctor Ismael Espinosa Espinosa.
Doctor del Laboratorio de Cibernética de la Facultad de Ciencias, de la UNAM.

la robótica es una ciencia muy compleja, que necesita ingenieros en computación,
ingenieros mecánicos y electrónicos, matemáticos y hasta expertos en fisiología. Desarrollar
un robot requiere de equipos multidisciplinarios que no siempre son fáciles de armar.

Las redes neuronales, que intentan ser la copia electrónica del funcionamiento de un cerebro.


Hay muchos aspectos que diferencian al cerebro humano de los sistemas desarrollados por la inteligencia artificial, entre ellos:
¿Pueden pensar las máquinas?
• Las máquinas carecen de mecanismos intuitivos y se basan sólo en el método automático de
prueba y error; por ello, no tienen la capacidad de reaccionar ante situaciones inesperadas ni la
posibilidad de generalizar acontecimientos distintos.
• Las máquinas carecen de creatividad, aspecto hasta ahora totalmente humano. En las máquinas
no existe una interrelación creativa, y los cambios de contexto no implican una modificación
sustancial entre sus circuitos y programas; el medio circundante no modifica estructuralmente
sus funciones.
• La mente humana está provista de valores producto de la interrelación social; al carecer de
aquéllos, las máquinas no pueden evolucionar o autoperfeccionarse.

Fuente: Renato Gómez Herrera es licenciado en literatura dramática y teatro. Desde 1990 se dedica a la divulgación de la ciencia y actualmente prepara su primera novela de ciencia ficción.

Reflexión:

El tema de drones, cyborg,androides, robots autómatas, siempre a causado polémica, entre los puristas y religiosos, pero fuera de todos los tabú que esto conlleva,  los beneficios y ayuda que esto seria para la humanidad es inimaginable, desde temas bélicos, como los usados para detectar y desarmar bombas, hasta los robot y drones para combatir el terrorismo, hasta los temas médicos, donde la tecnología y robotica están posibilitando acciones que antes eran solo parte de la ciencia ficción, como la posibilidad de combatir enfermedades desde el interior de un ser humano con nanorobots inyectados como si de un medicamento se tratase.
Pasando por los robots que harán la vida más placentera en la vida diaria.

Todo esto es normal, siempre ha sido de esta forma, cuando personas de cierta generación se enfrentan a cosas nunca antes vistas, se tacha de cosas negativas "cosas de una fuerza demoníaca" "magia negra" y simplemente la prepotencia del hombre o necesidad de sentirse "Dios", al tratar de imitar la vida humana como lo es el caso de la Inteligencia Artificial y la Clonación.


Si bien es cierto que hoy en día existen inteligencias artificiales que pueden simular ciertos comportamientos humanos, aun no existe un robot que sea un completo autómata, que evolucione por si solo y aprenda de su entorno, pero hoy en día ya convivimos con inteligencias artificiales hasta cierto punto todos los días de nuestra vida, de cierta forma todos cargamos un celular "inteligente" para nuestras vidas diarias.

Lo que no estoy seguro es de si la humanidad esta preparada para llegar a un punto de convivencia entre seres humanos y seres ciberneticos o inteligencia artificial, sin que esta ultima se convierta en un peligro para la mayoría, aunque se escuche muy fantasioso o muy al estilo de la película terminator, como lo dice el texto, esta tecnología en sus inicios solo sera exclusiva para la gente que puede obtenerla económicamente, y dependiente de los usos que estas personas (la minoría), quieran hacer con ella.

Cualquier avance que surja con la tecnología, siempre será un paso hacia adelante como raza, pero para que sea considerado como evolución siempre dependerá de la ética con la que esta se utilice.



sábado, 19 de marzo de 2016

¿Que es ser un estudiante en línea?


UnADM

Etapa 4: Curso propedéutico

Aspirante: Manuel Antonio Gutiérrez Gordillo
Actividad 3 (Eje 1): Resumen “¿Qué es ser un estudiante en línea? 




La modalidad de estudios en línea, es decir, aquella que incorpora a las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) se caracteriza por su concepción del proceso educativo el cual se ve mas como un proceso de aprendizaje que como uno de enseñanza, así como por su realización en un Ambiente Virtual de Aprendizaje (AVA) espacio que engloba una visión conjunta del cómo se enseña pero sobre todo del cómo se aprende. 

Bajo ésta óptica el estudiante en línea es aquel que asume las siguientes actitudes.

- Pasa de pasivo a proactivo. 
- Es exigente en su participación. 
- Pasa de la estática en el tiempo y espacio a la dinámica autogestiva. 
- Da seguimiento a su actuar académico. 
- Interactúa con el grupo y el docente.  
- Aprovecha los aportes de la Internet y la riqueza del conocimiento. 


El ser un estudiante en línea implica en una persona todo un conjunto de conocimientos, actitudes, retos, ventajas y compromisos, pero con la ventaja de poder establecer su propio ritmo de aprendizaje, establecer sus metas y en suma ser el personaje más importante de su propio proceso de aprendizaje.


 Fuente:López Meza Ricardo D. (2016). ¿Qué es ser un estudiante en línea?

Creando mi blog


Hace tiempo que no trabajaba en un blog, cuando estudiaba y daba mi servicio social en mi universidad, se me pidió abrir uno para la comunidad, y en verdad es una herramienta útil para compartir cualquier tipo de información.
Después de concluir con mi servicio, por las actividades de mi trabajo ya no volví a utilizarlo, ahorita que se me pide volver a hacerlo, es un poco el retomar y acostumbrarme a todas las herramientas que en el hay y sus funciones, pero espero pronto estar utilizándolo de una forma natural.
Saludos.